Capítulo 41 —Solo por Sasha
Narrador:
Días después…
Roman estaba sentado en su despacho, el vaso de whisky intacto en su mano, la mandíbula apretada con una tensión peligrosa.
—Dime que tienes buenas noticias —su voz era un filo de acero.
Al otro lado del teléfono, el contacto que había conseguido dentro del centro de reclusión exhaló con incomodidad.
—Hicimos todo lo posible, señor Adler. Usamos cada contacto, cada recurso… pero ya es tarde.
Roman sintió un vacío abrirse en su pecho, un vacío que odiaba sentir.
—¿Qué significa eso? —preguntó, aunque en el fondo ya lo sabía.
El silencio al otro lado fue más elocuente que cualquier palabra.
Finalmente, la respuesta llegó como una sentencia.
—Significa que ya no está aquí. Se la llevaron hace dos días.
El whisky se derramó sobre sus dedos cuando Roman apretó el vaso con fuerza.
—Dos días, dos mald*itos días. —Había estado moviendo cielo y tierra para sacarla de ese infierno, y ella ya ni siquiera estaba allí. —¿Por qué nadie me avisó?
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