Capítulo 123 — Vine a quedarme
Narrador:
Miranda llegó a la galería sin avisar. No era la primera vez. Ya lo hacía con frecuencia, amparada en la excusa de ver a Sasha o de dejarle algún libro para el colegio. Esa tarde apareció con una caja pequeña y una sonrisa discreta.
Roman la vio apenas cruzó la puerta. Dominic no estaba en la entrada. Tampoco había nadie más que pudiera detenerla.
—¿Vienes a dejar algo o a recoger otra cosa? —preguntó él desde el final del pasillo, sin moverse.
—Solo quería pasar un momento —respondió ella, alzando la caja —Es para Sasha. Unas cosas que pidió. Nada grave.
—Déjalo en recepción.
—Preferiría dártelo a ti. Si no te molesta.
Roman no contestó. Caminó hacia ella, despacio, con las manos en los bolsillos del pantalón. No había cordialidad en sus gestos. Solo una paciencia que ya no era cortesía.
—Ya está bien, Miranda.
—¿De qué?
—Del jueguito. De las visitas sin avisar. De las frases cuidadas. De ponerte cómoda en una vida que abandonaste hace años.
El