PoV Athius
Desperté en una cama que no era la mía. Miré hacia todas partes, conmocionado por no saber en donde me encontraba.
Creí que todo había sido una pesadilla de la cual estaba despertando. Al ver que no estaba en mi habitación, en mi castillo, palidecí. Mi mano derecha me temblaba y al mirarme, volví a tener consciencia de mi debilidad.
Golpe el respaldar de la cama con todas mis fuerzas. Las astillas se clavaron en mis nudillos.
—¡Esa perra!
Grité con todas mis fuerzas. El enojo era tan grande dentro de mí que incluso se me dificultaba respirar. Era como si ahora todo me costara un gran trabajo. Mi fuerza, que antes rivalizaba contra la de mi padre, ahora era insignificante. Ni siquiera pertenecería a la manada real como guerrero. Apenas si podría ser un explorador.
Pensar en Lumen hacía que el corazón pareciera estallarme. El odio era tan corrosivo, hacía que mis manos temblaran todavía más. El ruido de mis golpes debió alertar a Mina, porque ingresó al cuarto sin avisar ni t