Mundo ficciónIniciar sesiónDebido a un desliz de Luca, Isla, molesta y frustrada, se encerró en su habitación. Negándose a escuchar cualquier explicación, lloraba aún más fuerte:
—¡Mamá y el tío son unos mentirosos!
Al escuchar eso, Vanessa sintió un punzante remordimiento. Isla tenía razón: tanto ella como Luca la habían engañado, y sus palabras habían perdido toda credibilidad a los ojos de la pequeña.
Insegura de cómo enmendar la situación, Vanessa se quedó afuera de la puerta, pensando en la manera de convencer a su hija de salir.
—Cariño, ¡te lo prometo! Como el tío Luca no está hoy, mamá te llevará al zoológico,







