Punto de Vista de Mia
El sol de la mañana apenas había salido cuando me instalé en mi escritorio, extendiendo los bocetos preliminares para el centro infantil. El vapor se levantaba de mi taza de café, enredándose en la luz de la mañana mientras repasaba mis notas de ayer.
Mi teléfono sonó, el nombre de Scarlett brillando en la pantalla.
—¿Ese desgraciado de verdad aceptó el divorcio? —La voz de Scarlett era sorprendentemente calmada, aunque podía escuchar la tensión subyacente.
—Después de que termine la cirugía de mi madre —dije, alcanzando mi café—. Ni siquiera discutió. Solo dijo que haría preparar los papeles.
—¿Así nada más? ¿Sin condiciones? ¿Sin amenazas sobre el contrato?
—Nada. —Moví un boceto a un lado, enfocándome en el diseño del jardín—. Solo... aceptó.
—Bueno, eso es... inesperado. —Una pausa, luego escuché papeles moviéndose de su lado—. Escucha, estoy viendo mi agenda. Puedo conseguirte una cita con Marcus, ¿recuerdas a mi amigo abogado?, esta tarde.
—Scarlett...
—No,