La diva despierta envuelta entre los brazos de los clones que duermen como bebé, suspira y se remueve incómoda por lo sucedido anoche. Por un momento pensó que moriría de placer cuando ambos decidieron llenarla después de inmovilizar su cuerpo y saciar su sed de tenerla.
Eva piensa en lo que le confesaron, recuerda sus expresiones de dolor y entiende que ambos han pasado por situaciones muy complicadas y que si decide quedarse a su lado. Entonces todo lo que conoce podría peligrar y su vida estaría en riesgo, sin embargo, su corazón duele con solo pensar en alejarse de estos.
Los Bogart despierta y dejan salir un bajo gruñido al verla, sonríe ante sus caricias.
—Buenos días, diva, —todavía no se acostumbra al apodo y a que