Ese mismo día cerca de la media noche Lían salió de su estudio privado para irse a dormir. La pequeña imagen de Sofía junto a la chimenea con las luces apagadas impidió que pudiera llevar la tarea a cabo, era bastante tarde considerando lo temprano que se despertaba a diario. Se acercó tratando de no sobresaltarla, su atención a la fogata parecía tan centrada que decidió ser sutil.
–¿No es algo tarde? Ya deberías estar en la cama.
Sofía no se asustó, despejó la vista de la candela y vislumbró como al que otros acostumbraban llamar el callado y serio Lían Dunhee sin sentimientos, sentarse a su lado.
–Yo solo estaba pensando en lo mal que debe sentirse Drew en estos momentos. Q