Capítulo 151. Desaparecida
[DANIEL]
¿Cómo describir aquel sentimiento que nace en el pecho cuando ves a la persona que amas, reír? ¿Cuando la ves cantar, a pesar de que lo hace mal; bailar de forma alocada aunque tenga dos pies izquierdos o cocinar descalza por las mañanas escuchando sin falta alguna su estación radial de canciones de los ochentas y noventas? Amaba todo de ella. Ninguno era perfecto, ambos estábamos un poco locos y teníamos cero coherencia en la toma de decisiones cuando se trataba de nuestras vidas, pero después de las discusiones y las amenazas de divorcio, seguíamos adelante, porque nuestras discusiones fomentaban la comunicación, y así, habíamos pasado más de un año de casados, queriendo hacer una guerra de todo y después firmar la paz haciendo el amor.
Esa noche no fue distinta, y aún con todo y la rutina, no fue igual a ninguna otra. Cada una era única. Sin embargo, no recuerdo haber disfrutado tanto de sus gestos al reír mientras le contaba mi día en la universidad o su seriedad al prest