Capítulo 62
Abrí los ojos y lo primero que sentí fue el calor de su cuerpo junto al mío. Liliana seguía desnuda, abrazada a mí, su respiración suave contra mi pecho, aún sudorosa después de una noche intensa, Un nudo me apretó el estómago.
Me levanté de la cama de un salto y me llevé las manos a la cabeza, el corazón se me ahogaba en el pesado sentimiento de la culpa.
Ella despertó poco a poco, se cubrió con la sábana su desnudez y sus mejillas sonrojadas me hicieron darme cuenta de su vergüenza. El silencio nos envolvió, ninguno sabía que decir.
—Liliana… yo me hago responsable de lo que pasó. Estaba en celo y sabes que un lobo no controla sus impulsos —Mi voz temblaba; necesitaba ser correcto, no dejarla sola en esa culpa, yo también había pedido.
—No, Ares, no te culpes, Yo te busqué. Quise estar contigo esta noche. Me gustas, y sé que eres un lobo prohibido, pero… fue lo más mágico que he vivido.
Su sinceridad me partió. Se vistió con manos temblorosas mientras yo, paralizado, m