BUENA:
Luego de una sección de sexo increíble es hora de irme, pero el niño Lucían no quería permitirlo.
—Lucían debo irme.
—No quiero que te vayas.
Dice haciendo un puchero y me río.
—Pareces un niño.
Le recrimino.
—Soy tu niño, y piensas abandonarme, no es justo.
Vuelve a decir mientras oculta su cara en mis pechos.
—Lucían…
Le reprocho y él se separa de mí.
—Está bien, vístete qué llamaré a uno de mis hombres para que te escolten, ese maldito de Maicol debe de estar rondando por ahí.
Dice y asiento de acuerdo con él.
Cuándo termino de vestirme Brandon entra a la habitación de Lucían.
—Alfa.
Dice haciendo una reverencia.
—Brandon, necesito que lleves a Buena a la celda, no permitas que nadie se le acerque, ni mucho menos el inútil de Maicol, si le pone un dedo arriba matalo.
—Sí señor.
Dice Brandon y me acerco a Lucían.
—Sí lo matas estarás en problemas.
—Lo sé, pero habrá una rata menos… Nadie puede tocarte excepto yo.
Dice y besa mis labios… Cada vez se vuelve m