Anna: 

Mi nana y yo estábamos en jardín terminando con las flores, hace demasiado tiempo que no hacía esto, llenarme las manos de tierra y mojarlas. Desde que me case con Levi no se me ha permitido hacer este tipo de cosas por el simple hecho de ser su esposa y la reina consorte de este país. 

Hace mucho que no me sentía en paz conmigo misma, me sentía feliz y eso se debía a mi nana, en lo bien que me ha tratado y la comida deliciosa que hizo para mi. 

Ahora la estaba ayudando con su jardin, me alegra que haya tenido ropa para mi junto con unas botas y un sombrero grande. 

—Esta quedando hermoso —ella venía con un par de vasos—, fue de mucha ayuda que te quedaras aquí. 

—No hay de que nana —me senté en el suelo a tomar la limonada que me dio—, te prometo que vendré más seguido. 

—No te preocupes mi niña, puedes venir cuando puedas. Por cierto, quisiera saber, ¿como te esta tratando el? ¿Lo hace bien?

Aquello me hizo desviar la mirada, ella me conocía perfectamente y sabía que debía ser honesta con ella, asi que le conte todo desde el inicio, con miedo a que me juzgara se lo dije todo. Tenia miedo obviamente, pero se que ella me dará un buen consejo, por supuesto que le dije también todo el cambio que ha tenido desde entonces. 

De lo bien que me ha tratado últimamente, que ha estado defendiéndome de todos los ataques y por demás. Fui honesta en decirle que, seguía sin perdonarlo del todo, que lo amaba pero que aún no se me olvidaba todo lo que me hizo, sus palabras, sus acciones, todo. Para mi no es sencillo olvidarme de eso. 

Pero reconozco que, ha hecho un esfuerzo enorme porque lo perdone, ha recapacitado y está aprendiendo de ellos, por mas que no lo perdone, debo reconocer que, lo ha hecho. 

—Es de humanos errar mi niña —me dijo—, no estuvo bien lo que hizo, pero está recapacitando, se ha dado cuenta lo hermosa y valiosa que eres... Nadie reemplaza a nadie, simplemente cuando las oportunidades llegan, es por algo ¿no lo crees? —asentí— Que siga esforzándose por ello, tu vales mucho. 

—Gracias por eso nana —suspiré—, la verdad es que me gusta su cambio, ha sido para bien —sonreí—, aún hay cosas por perdonar, pero, se que podré hacerlo, porque ahora está dándome mi lugar, como su esposa... La corona no me importa, solo quiero que me de mi lugar. 

—Se nota que le gustas, si no, no hubiese venido a mitad de la lluvia a buscarte —rió—, eso es querer, además... Se que es un buen hombre, a pesar de todo lo que vivió, es un buen hombre. 

Claro que lo es, Levi es un buen hombre y me alegra mucho que haya vuelto aquel hombre bueno y justo, que está dispuesto a todo. 

Ahora me toca esperar a ver qué pasa con Neumann, el parecía seguro de destituirlo como presidente, supongo que esas son cosas delicadas que tomaran algo de tiempo. 

Y la verdad, si quiero que se vaya, que sea destituido, porque aún no se me olvidaban esos comentarios hacia mi. Pensé que sería un caballero, cuando lo conocí, eso fue lo primero que pensé de el, que sería un hombre bueno y respetuoso, pero se sabe que eso es solo una facha para ocultar lo que es, un depravado. 

Me pregunto si habran mas chicas, si en algún momento las llego a acosar o decir cosas inapropiadas. Algo me dice que si las hay. 

—Ya regreso, iré a prepararte ese Sándwich de queso que te encanta. 

—Gracias. 

Mi nana se fue hacia adentro de la casa, yo me quede en el jardín arreglando sus flores. Estaba quedando demasiado hermoso, estaba pensando en enviar a alguien para que le eche una mano a mi nana en la casa, quisiera hablar con Levi y decirle que vinieramos a remodelar su casa, ya esta casa está un poco vieja. 

Es lo menos que puedo hacer por ella. 

—Anna —miré a mi nana, me puse de pie al verla preocupada—, tienes que ver esto. 

Entré a la casa con ella, caminamos hacia la cocina en donde estaba un televisor, ella le subió el volumen, en la pantalla se veía a Levi junto con su equipo de seguridad y algunos miembros del senado y presidencia detrás de el. 

Esto no es bueno.

Debajo había un anuncio de las noticias, sobre el decía: Destitución de Gideon Neumann, por casos de acoso sexual. 

Mi mano se fue a mi boca al ver a Levi hablando con mucha seriedad. 

—Hay en total, ocho cargos de acoso sexual y uno de abuso por parte del ex presidente, Gideon Neumann —musitó—, se ha destituido de su cargo y se han incautado todas sus propiedades en Austria y parte de Alemania, con esto, doy el anuncio de la orden de captura contra Gideon Neumann. 

Lo sabia, sabia que habian sido mas chicas, pero no pensé que hubiera un ataque sexual. Todo esto es muy horrible, Dios mio. 

La foto de Neumann fue puesta en la pantalla con toda su informacion, estoy realmente sorprendida con todo esto, pensé que su destitución iba a tardar más de lo pensado, pero el es el Rey de Austria, el es quien da las órdenes aquí, todo debe hacerse tal cual el lo pida. 

Me siento bien que haya sido denunciado, pero mal a la vez porque el sujeto logro escapar y sabra Dios en donde se está escondiendo, espero que lo atrapen antes de que le haga daño a alguien más. 

Levi seguía hablando y hablando mientras se escuchaban los reporteros tratando de hacerles preguntas. Sentí como mi nana me tomo de la mano para darle unas caricias, cosa que me hizo sentirme más tranquila, en serio que si estaba un poco inquieta debido a esto, siento que comenzarán las especulaciones, yo solo espero que nadie crea que todo esto fue mi culpa. 

(...)

Más tarde: 

La seguridad del palacio vino a buscarme para llevarme hacia allá, me despedí de mi nana y le prometí que vendría a verla mas seguido, me gusto mucho que hayan sido prudentes con eso, ya que a ni nana no le gusta esas cosas de las cámaras y yo tampoco quiero que nadie la moleste. 

Cuando llegué al palacio fui hasta la habitación para cambiarme ya que tenia puesto el overol y ese estaba un poco sucio porque no me dio tiempo de cambiarme. 

Me di un baño, me tome el tiempo de relajarme y descansar. 

—¿Anna? ¿Anna amor, estás aquí? 

—En en el baño... 

En el umbral de la puerta apareció Levi, se recargó en el y me sonrio, se había quitado el saco por lo que se ve. 

—Hola linda, ¿quieres compañía?

—No me molesta —sonreí. 

El se quito la corbata, se soltó el cinturón, mi vista se fue a sus manos, sus enormes manos se movían con lentitud mientras desabrochaba su pantalón, cuando terminó, comenzó a hacerlo con su corbata y luego con su camisa. 

Cuando terminó de desnudarse, se metió a la tina conmigo, se había posado detrás de mi, suspiré al sentir el calor de su torso en mi espalda. Tomo mi mano para entrelazar sus dedos con los míos. 

—Tu mano es muy pequeña —yo reí—, ¿como que jamás pude notarlo? 

—No lo sé.. —murmuré— pero me gusta como se ven juntas —aún seguía mirándolas. 

—A mi tambien me gusta —me beso el cuello—, así como me gustas tu..

—¿Te gusto? ¿Te gusto mucho?

—Así es —susurró en mi oído—, me encantas Anna, demasiado. 

Su mano rodeó mi cuello y parte de mi mandíbula, giro un poco mi cabeza para que nos dieramos un beso, soltó mi mano para así, acariciar mi muslo. Su lengua se metió en mi boca y ambos comenzamos a jugar con ellas, esta sensación era tan placentera que no sabía cómo explicar.

La mano que posaba en mi muslo iba metiéndose a mi intimidad, yo jadee en su boca al sentir como sus dedos estaban metiéndose en mi poco a poco. Me removí un poco por el placer, esto realmente me encantaba. 

Levi y yo nos separamos un poco, yo estaba jadeando sobre su boca. 

—Estás lista mi amor —murmuró—, montame. 

Me separe un poco de el para voltearme y subirme encima, su brazo rodeo mi cintura, yo introduje su miembro en mi, ambos gemimos al unísono, Levi besaba mi cuello y me apretaba aún más a el, lo hacia con tanta posesividad que me parecía de lo más delicioso que ha hecho. 

La mano de Levi se metió en mi nuca e hizo que ambos nos miraramos. Su boca estaba abierta mientras jadeaba sin control y me movía encima de el. Unimos nuestras frentes y rozamos nuestras narices, eso me encanta, quisiera poder decirle que lo amaba y que lo necesitaba. 

—Vamos mi amor, correte, hazlo —me ordenó. 

Me moví aún más rápido, el agua salpicaba nuestros cuerpos, los jadeos se mezclaban en el baño sin control, mi cuerpo se tenso y deje escapar mi orgasmo, yo jadeaba sobre su boca mientras se pasaban mis espasmos. 

Levi me dio un beso intenso, uno que hizo que mi excitación regresara. 

—A la cama —le dije y el sonrió. 

—Lo que mi mujer ordene. 

(...)

Más tarde: 

Levi y yo estábamos cenando en el comedor, después de unas cuántas horas encerrados en la habitación haciendo el amor, cada vez que me miraba, me sonreía de una manera coqueta o divertida, le encanta molestarme con eso. 

—No se si viste las noticias —dijo mientras picaba su carne—, pero ya pude destituir a Neumann. 

—Si, eso pude ver —susurré—, no sabía que habían más chicas, aunque algo dentro de mi lo sospechaba.

—Hicimos el comunicado a la prensa —me miró—, salieron mas chicas valientes a denunciarlo, luego una de ellas denunció a Neumann por abuso sexual, no entraré en detalles, pero la chica trabajaba para el. El le dio dinero para que se callara y se fuera del pais.. 

—Dios mío —dije un poco asustada—, qué hombre tan horrible. 

—Si, fue un idiota —me respondió—, por eso fue destituido pero al parecer alguien lo puso sobre aviso y terminó huyendo como rata. 

Gideon Neumann resultó ser mucho peor de lo que pensaba, que mal que se haya escapado, espero que lo encuentren pronto. 

—Cambiando de tema, iremos a Alemania en dos días —sonrió un poco al igual que yo—, iremos a visitar a mi hermana y su familia —extendió su mano para que yo la tomara—, hablé con ella y están encantados con que vayamos a verlos.. 

—Me gusta mucho la idea, llevaré algunos regalos si te parece bien. 

—Claro que si, después de nuestro viaje, comenzaremos unas cuantas actividades aquí —asentí—, hay bastante trabajo que hacer.. Quiero tomarme esos días para descansar ya que las actividades son muy agotadoras. 

—Entiendo —suspiré—, quería hablar de algo importante contigo. 

—¿Que es? —se limpió la boca con la servilleta y me miró muy atento. 

—Pues, verás... La casa de mi nana está un poco deteriorada, yo.. Bueno.. 

¿Que me pasa? ¿Por qué no puedo decirle? Si ya se que no va a gritarme, tampoco se negará. Dios. 

—¿Que pasa mi amor? Puedes decirmelo. 

—Bueno, quisiera poder remodelar la casa de mi nana —le dije al fin—, está un poco deteriorada y quisiera poder hacerlo... No te preocupes por nada que yo me encargo de todo eso y...

Me quede callada cuando el comenzo a reir. 

—¿Por que te ries?

—Porque me estas diciendo eso tan rápido que no te entendí muy bien —negó—, se que aún te causa nervios por lo que diré y lo entiendo, pero no voy a negarme —negó de nuevo—, ella es tu nana y es importante para ti, así que está bien, haremos lo que sea necesario ¿bien? Así que no te preocupes que yo me encargo de todo.

Yo sonreí como tonta, me puse de pie y fui hasta el, me senté en su regazo, le tome las mejillas y le di un beso. 

—Gracias Levi —susurré—, no sabes lo importante que es esto para mi. 

—Dime mi amor —miró mis ojos—, ya no quiero que me sigas llamando Levi, quiero que me llames amor —acarició mi mejilla.