RESISTIÉNDOSE AL AMOR. Capítulo 19: Los días contados
FINN LYNCH
—Tu hielo —dijo Beth en cuanto regresó, metiéndole la mano a Evan en un vaso grande de frappé.
La mandíbula de mi hermano se desencajó y sus ojos se abrieron hasta casi desorbitarlos, pasando su mirada entre su mano dentro del vaso con café y la cara llena de satisfacción de Beth, buscando las palabras correctas para comenzar a despotricar contra ella.
—Eres tan jodidamente odiosa… —siseó luchando contra su sorpresa, pero al notar que la sonrisa de Beth se hacía más grande, perdió la paciencia y pellizcó su nariz, aferrándose a ella.
—¡«Oie»! —exclamó Beth con voz gangosa y también lo tomó por la nariz en un intento para obligarlo a soltarla.
En verdad parecían dos niños pequeños, peleando y viéndose con odio.
—Basta… Suficiente… —Me acerqué a ese par de rubios y los tomé por las muñecas, invitándolos pacíficamente a soltar sus narices—. Suéltense de una vez.
—¿«Qué adás di do la duelto»? ¡¿«Demandadme»?! —refunfuñó Evan con la misma voz gangosa.
Sin saber qué más hace