NARRADORA
El Beta quería moverse para escapar, las centurias estaban con ganas de saltar en llamas por todos lados, pero se hundían cada vez más.
Sin poder mover ninguna extremidad y el sentimiento de asfixia, estaba llenando de pánico el corazón.
— ¡Libéralas a ellas, al menos, son Centurias, sabes las pocas que quedan! Hazlo por tu pareja, ella no te lo perdonará…
— ¡No me digas lo que tengo que hacer, Beta y menos menciones a mi mate! – Hakon le habló entre dientes
Con la misma, lanzó una afilada rama del árbol, por el aire, encajándola de a lleno en la resbaladiza serpiente que escapó herida.
— No morirás ahora a pesar de haber invadido mi territorio, pero de que sobrevivas o no en el futuro, depende de tu Rey ¡Sáquenlos!
Ordenó y enseguida sus guerreros se pusieron a “pescar” los nuevos rehenes y llevarlos a tierra firme.
— Si intentan usar su magia de fuego, adiós a su Beta – les advirtió a las Centurias descubriendo sus pensamientos internos.
Las mujeres miraron la dag