Capítulo 96
La presencia de Max, era la de un lobo imponente que acababa de descubrir que dentro de su corazón vivía un ser legendario.
Se bajó del caballo y caminó directamente hacia los lobos supremos, Amelia tenía una sonrisa en su rostro pues se dio cuenta que su hijo había encontrado lo que tanto había buscado.
—Ella no se casará con César, porque en lugar de Renata es junto a futuro Alfa de la manada Luna roja, y ese Alfa soy yo.
César sintió un escalofrío recorrer su piel, su hermano ya no se veía tan débil como antes, una fuerza que emanaba dentro de su ser, camino y lo miró a los ojos fijamente.
—¿Cómo puedes pedir un trono? No te das cuenta que eres peor que nada, un Lycan qué presume ser una raza superior, pero ni siquiera tienes un lobo.
Las burlas de César se encajaban en la principal inseguridad de Max, él siempre pensó que sin un lobo era poco suficiente para poder ser el líder de Luna roja.
—Para ser el líder de una manada, se necesitan muchos más cualidades que te