Apretó los labios y frunció el ceño. —¿Y qué? ¿Tengo que elegir entre un acosador potencialmente violento o el Gamma? ¿Cómo se llamaba? ¿Cazador?—

Asentí. —Es un buen hermano, por si te sirve de algo—.

—¡Es un salvaje!—

Su voz se elevó lo suficiente como para que Logan nos mirara, arrugando la frente.

Puse los ojos en blanco y él negó con la cabeza, volviendo a la conversación. «Logan empieza a sospechar. Intentará escuchar. Tenemos que hablar más bajo», murmuré.

—¿Se lo diría al rey?—

—No. Está de mi lado.

Principalmente.

—¿Qué tan malo es el acosador?— pregunté.

Es más fácil mostrártelo. Déjame terminar esto.

Se puso las vendas rápidamente, se quitó los guantes y sacó el teléfono del bolsillo. —Pensé en ir a la policía, pero no puedo hacerlo sin admitir la verdad—.

Nova me entregó el dispositivo y abrí los ojos como platos al ver los mensajes. Había uno o más cumplidos sobre su pelo, su ropa o un tatuaje que se había hecho, todos los días. Siempre la llamaba —lobita—.

Eso fue bastan