ILÁN:
Eleonora abrió la boca para protestar, pero levanté una mano para silenciarla. Aunque había prometido tratarla con respeto, tenía un objetivo claro y no quería que se pasara de la raya.
—Es mi última palabra, Eleonora. Acepta esto o no habrá trato —dije con firmeza.Viéndola resignarse, sabía que no tenía más opciones. Me levanté, rodeando el buró.—Mi abogado se pondrá en contacto contigo para arreglar los detalles —concluí con una falsa amabilidad—. Ahora, si me disculpan, debo ir a ver a mi esposa para tratar el asunto de Geraldine. Pueden acompañarme al jardín si lo desean. Ambas mujeres se pusieron de pie y me siguieron hacia el jardín, donde Ivory reía despreocupadamente con Amelie. Pero al ver acercarse a la comitiva, su sonrisa se desvaneció, dando paso a u