OCTOGÉSIMA SEGUNDA PROFECÍA
”…Y de tal suerte ha de surgir, nacida
bajo la insignia de una antigua casa,
-con la fe de la noche redimida-
una prístina hija de las Razas.
Su voz levantará sobre las sombras
la historia de volúmenes añejos,
y cargará en la letra que la nombra
el alba y el ocaso del Concejo.
Su mirada, cual cielo tormentoso
será hecha de dolor y de mentiras.
Su despertar: violento y azaroso.
Su espíritu: cual llamas de una pira;
no dejándole al alma más reposo
ni placer más profundo que la ira…”
*Fragmento encontrado en el Libro de las Profecías, 87 años después de su tercera desaparición.