Han pasado un par de días desde que llegue del hospital.
Dos días en los que, si no salgo de esta habitación, voy a volverme loca.
La familia de Renzo ha sido muy amable, y se han preocupado por mí. Eso, no hay como pagarlo.
En cuanto a Renzo. Bueno, está algo diferente. Ha sido amable, en las noches se asegura de que estoy cómoda y he tomado mis analgésicos.
Oficialmente, la pared de almohadas se ha ido, y compartimos la cama sin problema.
Me acerco a la ventana, y miro a través de esta. Puedo ver la hermosa mañana.
De repente, una risa estridente y desagradable llama mi atención, y miro atenta como Renzo camina junto a un grupo de personas. Y, vislumbro una figura conocida. Una mujer alta, curvilínea, de cabello castaño claro.
Están más cerca y es imposible no reconocer a la amiga de Bianca.
Dolly Parton está de visita, y va enganchada del brazo de Renzo.
Hermoso.
Delante de estos, van Bianca, y Lorenzo, que habla con un hombre de alrededor, su misma edad. Los veo perderse