Cap. 74: Pórtate bien
Patricia le lanzó una mirada de advertencia a Enzo y este giró para concentrarse en el pequeño que tenía en brazos, William que se había mantenido en el umbral de la puerta esperando si había alguna instrucción de última hora o si podía retirarse, sonrió sin disimulo al ver la interacción de su jefa con su jefe.
–¿Oíste lo que dijo? Patricia, yo soy de Italia y si lo que dijo ese tatuado es cierto, estás en peligro, esa gente vive entre sangre, disparos, torturas…
–Cálmate, ¿cuál mafioso conoces tú que te diga tan abiertamente que lo es?
–¿Está alardeando?
–Por supuesto, tampoco me creas tan tonta como para relacionarme con delincuentes, él era rapero, no vendió y lo despidieron.
–¿En serio?
–¿Quieres que te busque alguna de sus grabaciones? Son una tortura, pero si así te convenzo.
–No, no, está bien, solo estoy pendiente por mi hijo.
–Ya deja eso, yo cuido muy bien de mi hijo, ¿está claro