—Bella, de la bella y la bestía.—respondió con una sonrisa y asentí conteniendo la risa.
—Bien...empezamos fácil.—hizo una mueca graciosa.—Es del continente asiático...—iba a abrir la boca pero subí la mano para que me dejara terminar.—Con un lindo traje azul, enamorada de un landrón de corazón puro y le encantan las alfombras.—me mordí la parte interna de mi mejilla y él arrugó la frente.
—Iba a decir Mulán...pero no.—elevé mis cejas y apreté los labios conteniendo una carcajada.—Jazmin...de Aladdin.
—Exacto...vas bien. Esa fue una capciosa porque sabía q