"Hana"
Salí de casa de Catarina corriendo, no quise asustar a las chicas, por eso no expliqué bien lo que estaba pasando, solo di una excusa y me fui. Mientras estaba en el taxi pensé en miles de cosas malas, pero principalmente, pensé en lo absurdo que era que Federico, aún estando preso, lograra seguir amenazándome, pero lo que realmente me asustaba era lo que podría hacerme o mandar a hacer mientras estaba en la cárcel.
Cuando el taxi se detuvo frente a mi edificio estaba nerviosa y temblando, al bajar noté una patrulla de policía estacionada en la esquina y Rafael corrió a abrazarme. Me apretó contra él, como si necesitara estar seguro de que yo estaba ahí y yo pasé mis brazos alrededor de él, porque necesitaba sentirme respaldada y protegida y nadie nunca me había hecho sentir protegida antes que Rafael, quien me sacó de las garras de Federico esa noche en el bar, cuando podría haber fingido que no había visto nada.
Rafael me llevó a mi departamento, me sentó en el sofá y fue a