"Renata"
Estaba ansiosa por ver a Breno y no me iba a quedar en casa mirando las paredes y ahogándome en desesperación, así que fui a la comisaría.
—Renatita, ¿qué estás haciendo aquí? —Flavio estaba sentado en su escritorio y me vio pasar por el pasillo en dirección a la cocina.
—¡No me voy a quedar en casa, Flavio! No mientras Breno no vuelva allá. —Entré a su oficina y me senté frente a él.
—Entonces vas a pasar unos días en mi casa. A la enana le va a encantar tenerte por allá, le encanta tener visitas en casa. Lo que no vas a hacer es ignorar tu descanso, ni trabajar si no estás bien, ya sabes, un error tuyo puede matarte y puede matar a cualquiera de nosotros que confía en ti para cubrir nuestra retaguardia. —Dejó de hacer lo que estaba haciendo y me dio toda su atención—. ¿Cómo estás?
—Ansiosa. En un rato voy al hospital, para la visita de la mañana. —Me pasé las manos por la cara, no había dormido nada, estaba sin concentración, cansada y preocupada. Flavio tenía razón, tr