"Melissa"
Estaba mirando a Fernando atónita, dudaba que supiera mi secretito, pero ¿qué significaba todo aquello entonces? Tenía una sonrisa convencida y yo tenía un montón de dudas.
Y fue entonces que Augusto entró, también vestido como Pedro, sosteniendo un cartelito en una mano y la manita de Marisol, que era empujada en el cochecito por Lisa, en la otra. Esta vez el cartelito decía: "Son almas gemelas, tía, créelo, de eso nosotros entendemos." Era mucha ternura ver a esos dos tan pequeñitos y tan apegados uno al otro.
Lisa levantó el cartelito en la manita de Marisol, su cartelito hizo que mi corazón fallara los latidos: "Y el tío te ama tanto, tanto, que no dejaría que solo tú te quedaras fuera del ' mejor embarazo perfecto'." Cerré mis ojos, fue como si el mundo hubiera desaparecido bajo mis pies y estuviera cayendo. ¡Él sabía!
—Abre los ojos, abejita, no vas a querer perderte esta parte. —Susurró y puso el brazo sobre mis hombros.
Abrí los ojos, sin valor para mirarlo, y vi