"Anabel"
La semana había pasado muy rápido después de que volví a trabajar, estaba adorando la oficina, veía a las chicas todos los días y me sentía parte del grupo. Pero también estaba ansiosa por todo lo que estaba esperando que pasara, el resultado del ADN, la mudanza a la casa nueva, el desenlace de las investigaciones que Flavio y Melissa estaban haciendo. Sentía como si todo estuviera yendo muy lento y Rick decía que era solo mi ansiedad, que necesitaba calmarme.
—¡Buenos días, hermosa! Es mañana de sábado, ¿por qué no estás en la cama conmigo? —Rick me abrazó por detrás y me dio un beso en el cuello que me hizo arrepentirme de haber salido de la cama tan temprano.
Había despertado muy temprano y no pude volver a dormir, entonces salí de la cama y fui a la cocina, estaba sentada en la barra, mirando la nada, con una taza de café en las manos y mis pensamientos desordenados, cuando él llegó.
—Podemos volver a la cama —sugerí y él sonrió.
—Sí, podemos. O, podemos salir e ir a