Domingo, 1:45 pm:
—No estoy tan seguro de que pueda tomar eso —Mark observó fijamente la botella que su novio sostenía animadamente en su mano y frunció su ceño. Jung sólo llevaba un día fuera del hospital y Jason ya quería emborracharlo.
—¿Cómo que no? —preguntó, evidentemente confundido.
—No sabes cómo funcionan los medicamentos, ¿no es así?
—No —admitió con simpleza, Mark sonrió enternecido; si había algo que él amara con locura sobre su novio, era esa sinceridad que le desbordaba por los poros.
—No importa. —Se encogió de hombros y volvió a mirarse en el espejo para arreglar su cabello, completamente consciente de la sonrisa embobada que se había fijado en sus labios y la apariencia que esta le daba. Jason sigui&o