A Través Del Muro De Cristal
La sala de reuniones del Whitaker Tower West en San Francisco estaba diseñada para intimidar: ventanales que iban del piso al techo, techos altos, madera de nogal oscuro y un sistema de presentación digital tan avanzado que respondía antes de que alguien terminara de hablar.
A su alrededor, seis de los ejecutivos más agresivos del sector minorista internacional discutían en voz alta sobre los márgenes de ganancia del último trimestre.
Callum estaba sentado a la cabecera. Inmóvil. Impecable.
Como un león esperando el momento de atacar.
Pero no escuchaba.
No realmente.
Su mente estaba a cientos de kilómetros.
En un apartamento de Manhattan.
Con una mujer que lo había de