Ojos Que Ven Demasiado
- ¿Estás bien?
La voz de Harper sonó apenas Aurora cruzó la puerta de la oficina.
Aurora se detuvo un segundo, con la mano aún en el picaporte. Había dormido poco, mal. O más bien… se había despertado sola, con una mezcla de vacío y electricidad recorriéndole el cuerpo.
Y aunque se había vestido con la precisión de siempre, aunque su cabello estaba impecable y el labial perfectamente aplicado, Harper no era de las que se dejaban engañar por una máscara pulida.
Aurora le sostuvo la mirada por un segundo de más.
- Estoy bien. - mintió con una sonrisa leve.
Harper la observó con la paciencia aguda de quien sabe que algo se ha