Capítulo 56. El Primer Ladrillo.
POV Jeremy.
Salir de la Corporación Walton no fue un acto de rebeldía sin sentido. Era un salto al vacío con un propósito claro: construir algo propio para el hijo que esperaba. Mis primeros días fueron una mezcla de euforia y pánico. Sin el apellido Walton como escudo, el mundo de los negocios era una jungla implacable.
Empecé por lo más básico. Contacté con algunos antiguos colegas y conocidos que siempre me habían respetado como persona, no solo por ser el «hijo de Joseph Walton». Algunos me dieron la espalda, pero otros, sorprendentemente, mostraron curiosidad.
Mi idea era simple, pero ambiciosa: una consultoría de gestión de proyectos para pequeñas y medianas empresas que Joseph Walton nunca habría considerado. No sería glamuroso, pero sería mío.
Mi primera oficina fue un pequeño espacio alquilado en un modesto centro de negocios. Pasaba horas al teléfono, haciendo llamadas, presentándome y vendiendo mi visión. No me abrían las puertas fácilmente. El escepticismo era evidente.
—S