Bella llegó y al ver a Irene no pudo evitar reírse.
—¿Te encontraste un billete o qué? ¿Tan feliz estás? —Irene, confundida por su risa, le preguntó.
—¿Encontrar dinero? Eso no es nada. —respondió Bella—. ¿Sabes a quién conocí?
—¿Fuiste a casa de la familia Pérez...? —inquirió Irene—. ¿A Pablo?
—¡Listo! —exclamó Bella—. ¡Me matas de risa!
Resulta que Joaquín había decidido llevar a Bella de improviso y sacarla de la cena, dándole la oportunidad a Ezequiel de pasar tiempo a solas con Irene.
Sin embargo, Joaquín temía que Bella empezara a sospechar, así que había planeado el día de antemano, llevándola a conocer a su madre, que era la abuela de Pablo.
Pero antes de encontrarse con la anciana, se topó primero con Pablo. Al verlo, Pablo se quedó sorprendido, sin imaginar que Bella realmente conocía a su tío. Luego, sintió desdén, recordando que esa mujer solía estar con Irene y no le había hecho la vida fácil.
Saludó a Joaquín con respeto y luego se dirigió a Bella.
—¿Qué haces aquí?
Si ha