Al momento del accidente de Guillermo, yo me encontraba abriendo las cajas de la mudanza, y de pronto escuché un sonido muy fuerte que llamó poderosamente mi atención, enseguida me asomé por mi balcón para saber de dónde provenía, y solo miré hacia la calle y me di cuenta del grave accidente que había ocurrido enfrente del edificio, sin embargo, a esa distancia era imposible darme cuenta de que se trataba de Guillermo.
— ¡Dios mío qué horror!
— ¿Qué sucede señora Ana Paula?
— Ha ocurrido un accidente enfrente del edificio, creo que atropellaron a alguien.
— ¿Puedo bajar a averiguar quién es?
— No Lola, es mejor que te quedes aquí, por lo que veo es algo muy grave y la verdad no quiero que vayas a ver algo que te pueda causar una gran impresión. Pobre persona sea quien sea, ojalá logre salvarse.
(…)
Y efectivamente eso era lo que trataba de hacer Luis José y el otro médico que lo acompañaba en la operación tratando de salvarle la vida.
Luis José sudaba a cántaros mientras la enfe