Sonrió complacida por la confusión de Harding y demostrando que puedo ser una buena compañera de vida, decido hablar con él sobre lo que puedo hacer o no, mientras estoy en casa, esperando nuestro viaje.
— Harding, no quiero que me veas como una chica que no sabe lo que quiere. Aunque en el pasado, te pedí que tomaras distancia para no ilusionarme, hoy te pido que nos acerquemos. >> Pienso que así como pidiendo distancia, hemos podido conocernos mejor, sin colocar alguna, podríamos amarnos sin que sea algo obligatorio para nuestra relación, sino, algo que surge y crece poco a poco.— Miley, yo no amo. Ni siquiera ame a Marisa. Ahora que he tratado contigo, sin poderlo evitar, he llegado a comparar mis sentimientos y no la amaba. — ¿Entonces?— Estaba obsesionado con ella. Parecía pura y buena, también, era bastante joven y muchas veces, f&aa