El auto salió del camino, Jorge perdió el control, y fue hacia un barranco, golpeando fuertemente contra un árbol.
La puerta se abrió y Jorge salió del auto, golpeándose con fuerza sobre el camino.
Mientras el auto, cayó màs profundo, y explotó haciendo tal ruido que fue escuchado por muchos, que se detuvieron y eligieron llamar a emergencias y a la policía.
***
Diego fue hasta la habitación de Amaranta.
Al entrar, la observó recostada en la cama. A veces, cuando ella dormía, él acudía a esa habitación, le gustaba verla dormir. A veces besaba su mano y le pedía profusamente perdón, sin que ella le escuchara.
Abrió los ojos, y se sorprendió al verlo ahí.
—¿Diego?
—Lo siento, no quería despertarte, quería ver que tú y mi bebé estuvieran bien.
Ella tocó su abultado vientre de casi seis meses, sonriò, asintió.
—Estamos bien.
—Entonces, duerme.
Èl estaba a punto de irse, pero ella lo detuvo.
—¿Quieres dormir conmigo? Si no puedes dormir, tal vez aquí puedas hacerlo.
Él sonriò, su mirada se