Capítulo 20. ¿Te refieres al beso que me diste?
En la mañana siguiente Aria se levantó aturdida y frunció el ceño al darse cuenta de que se había quedado dormida en la habitación de Luna, pero ella no estaba por ninguna parte y se preocupó al pensar que por quedarse dormida no la cuidó bien, así que se levantó de prisa para buscarla.
Cuando llegó a la sala vio a Luna junto a Lucien en el sofá, ella se veía perfectamente y él estaba sin la máscara y volteó a mirarla. Cuando las miradas de los dos se encontraron Aria tuvo un breve recuerdo de lo que ella le había dicho ayer y en la posición que estaban, por lo que sus mejillas se ruborizaron.
“Dios mío, espero que eso haya sido un sueño, yo no pude decirle algo así.” Pensó con sus nervios atacándola.
— Buenos días, ¿Cómo está Luna? ¿No le ha dado más fiebre? Lamento mucho haberme quedado dormida en su habitación mientras la cuidaba.
— Hola Aria. — Saludó Luna con una sonrisa.
— Ella está bien, ¿Y tú cómo estás? ¿Te sientes bien? ¿Tienes dolor de cabeza o algo? — Preguntó Luci