98. Volverlo a ver
Dania
No sé en qué momento la música de piano desapareció, o quizás puede que nunca estuvo aquí y entre mi frenesí al tocar la imaginé; cuando terminó aquella melodía cargada de sentimientos bajo el violín sintiendo de pronto el instrumento sumamente pesado, me niego abrir los ojos y regresar a la realidad, pero no puedo permanecer para siempre en la reconfortante oscuridad de mi interior.
Abro los ojos con pesar y me encuentro con las filas de asientos vacíos de mi inexistente público, eso fue... un poco liberador, pero es hora de volver a casa, me voy la vuelta para regresar el violín al lugar donde lo tomé, pero al darme vuelta siento que el corazón se me detiene de golpe y pierdo la función básica de mi cuerpo que es el respirar.
Él está aquí, vestido con un impecable traje negro, esta vez lleva bien arreglado el abrigo y una corbata negra perfectamente acomodada en su camisa, se le ve tan elegante y pulcro, una parte de mí siente anhelo por esa versión suya algo desaliñada y r