CHIARA :
Asher permanece sentado en la cama mientras lo regaño como a un niño.
¿– Tienes idea del alboroto que se había armado se habías salido a matarlo?
Hablo con las manos en forma de jarra.
– Si, ya sé que cometí un error... Pero no puedo soportar ver...
– Si ya lo has repetido varias veces... Pero debes de aprender a controlarte, soy bastante fuerte y tengo personas a mi alrededor que me protegen.
– Pero...
– Sshhh.
Lo callo con un dedo en su boca.
– Ya no se diga más Asher... Estoy agotada, ven dame un masaje.
Digo mientras me acuesto en la gran cama.
Asher con sus grandes manos empieza a darme un rico y sabroso masaje en mi cuerpo.
¿– No crees que tienes demasiada ropa para darte el masaje?
Me susurra en el oído con la voz grave.
– Creo que sí.
Digo coqueta, me retiro la ropa y me acuesto boca abajo.
– Así es más cómodo para tí, vamos continúa.
Hablo cerrando los ojos y escucho su suspiro.
Sus manos vuelven a mi cuerpo, pero esta vez no me está dando un masaje si no acar