Viernes
Me encontraba nerviosa, y sentía que en cualquier momento vomitaría todo lo que había comido en el desayuno. Empecé a caminar de un lado a otro.
─ Te puedes tranquilizar, me estoy empezando a marear ─exclamó Julieta y negué
─ ¿Por qué no estás nerviosa? ─pregunte al verla sentada y relajada—. Cada vez faltan menos minutos para saber el resultado
─Tranquila, yo sé que estará bien ─dijo y luego agrego ─. Mírame yo estoy tan tranquila, porque sé que lo harás bien y se lo que has hecho para estar hoy aquí.
─ ¿Estás lista? ─pregunto Roberta entrando con un vaso de limonada al estudio y sonreí.
Habían logrado quitarme los nervios
─ Ahora sí, estoy más que lista ─dije tomando los papeles y ellas me dieron una mirada rápida.
─Lo sé, ve y