ADELAIDA:
Luego de él príncipe haber pagado la enorme cantidad continuamos caminando mientras observamos algunos puestos de comida.
—Miren hay una obra que va a empezar.
Habla mi hermana deteniéndose frente a un cartel.
—Que bien, pero ya quiero irme a casa.
Digo suspirando, la verdad estoy cansada y aburrida.
—Hay, no seas así hermanita, sería divertido y romántico asistir… ¿Qué dices lord Norfolk?
Le pregunta a Raizel mirándolo con lo que supongo es ¿Coquetería?
—Si, creo que no estaría mal mirar una obra.
Dice este y ruedo los ojos.
—Bien, entonces el príncipe y yo nos marcharemos…
—No, claro que no lady Ivanov, me encantaría mirar la obra, venga.
Dice tomándome del brazo y me lleva dentro.
Los administradores al ver al príncipe nos dejan pasar de inmediato y sin problemas alguno.
Nos sentamos en la segunda fila ya que hay varios asientos vacíos.
Soy la primera en tomar asiento y atrás me sigue mi hermana, luego el príncipe y por último Raizel.
—Compórtate Adelaida, me estás hacien