Leonard me ve, estoy petrificada en mi lugar, el escalofrío me congeló el cuerpo entero.

-¿Estás bien? - pregunta extrañado.

-No - sonrío sarcásticamente - ¿acaso, me ves bien?

-Disculpa...no se que preguntar.

*¡Lárguense ! - me susurra el ente en mi oído solo escucho la horrible voz del "no humano" y tengo un escalofrío que me corre nuevamente por toda mi espalda.

- Quiere... que...nos vayamos. - balbuceo temblando.

-Pues salgamos. - exclama Leonard apurado, sigo en mi lugar, no quiero dar la vuelta, ni tampoco moverme, si lo hago sé con qué me topare y sinceramente la imagen no me gusta.

-Dilayla ¿porque no te mueves? - pregunta sin comprender mi terror.

-¿Ustedes no sienten nada? - pregunto petrificada de miedo.

-Pesadez - comenta Doug. - y poca energía.

-Ustedes sienten eso, pero al dar vuelta, yo me toparé con esa cosa, de frente.- Trago saliva nerviosa y asustada - La veré como los veo a ustedes. - respondo temblando.

Odio ver "no humanos" esto es la parte horrible de ser médium, ves lo que nunca nadie quisiera ver.

Leonard rápidamente me toma de la mano con fuerza.

- Estas helada - comenta, apretando mi mano intentando conformarme.

Su contacto me relaja, mientras los otros muchachos se colocan como escudos humanos al rededor mío, cuando empezamos a caminar cierro los ojos  para no ver  al ente, aunque el sigue amenazandome en mi oído, se desea apoderar de mis pensamientos, intento concentrarme en Leonard para no permitir eso mientras los chicos me dirigen hacia el primer piso, intento  cerrar mi mente y mis sentidos para no ver, ni sentir más.

Unos minutos después llegamos al primer piso, cerca de la puerta de salida, Leonard suelta un suspiro largo como si hubiera aguantado el aire  por mucho tiempo.

-Es la primera vez qué nos ponemos tan tensos. - comenta mientras me sigue apretando la mano, pero yo la quito nerviosa.

-Ehhh sí... - respondo todavía con la boca seca, del susto que todavía tengo.

-¿Qué es esa cosa? - pregunta Robert.

Mientras intento relajarme, doy un largo suspiro e intento volver a enfocarme.

"Esa cosa me quito mucha energía".

-¿Es un demonio? - pregunta Brad.

-No lo es - respondo intentando explicarme- hay varios tipos de "no humanos" hombres sombra, demonios y existen otro tipo de entes que succionan energía de las personas, etc... La maldad en los otros planos, como en nuestra realidad, es infinita... - Mientras sigo explicando vamos saliendo de la fábrica y nos dirigimos a la camioneta para guardar los aparatos -¿Alguno vio o leyó Harry Potter? - pregunto, sé que me mirarán como loca, pero quiero exponer un punto - Los cinco se miran como si hubiera preguntado la fórmula de la relatividad, o su secreto más obscuro -Ehhh no estoy preguntando, nada malo... Solo quiero explicar algo... - prosigo.

Con vergüenza Robert levanta la mano.

-...Yo leí - mientas los otros cuatro se ríen en su cara, pero al ver mi ceño fruncido tragan sus burlas.

-Ok, entonces sabes de los dementores.

-Sí, pero esto no es un dementor... Esas cosas son fantasía.

-No es un dementor que te congela, ni te quita los momentos felices de tu vida y te deja vacío con un beso, este ente te succiona la energía por eso sintieron pesadez, se tensaron y se sintieron débiles, por eso también me quede petrificada, seguro que existe un portal en algún lado de la fábrica, además estoy completamente segura que sus aparatos se quedaron sin batería, les encanta succionar electricidad.

-Eso es verdad - comenta Robert - la cámara y mi teléfono se descargaron y cuando entramos estaban a full.

-Está bien, sí, tal vez hay un portal - Leonard y los otros vuelven a reírse aunque intentan no hacerlo tan evidente - es un dementor-  prosigue intentando no burlarse pero es evidente que lo está haciendo.

-Un dementor energético...diría yo - recalco - es solo, para darle un nombre.

-¿Sabes cómo sacarlo?

-No, yo no me ocupo de los "no humanos " - exclamó negándome rotundamente - ustedes son los genios, intenten atraparlo, científicos locos.

-Nos prepararemos - responde Doug, pensativo - ya sé me ocurrirá algo, mañana vendremos e intentaremos atraparlo... - empieza a anotar ideas en una libreta - tengo varias ideas para hacer una máquina y atrapar a ese "no humano"

Leonard se acerca a mí.

-Mañana nosotros nos encargaremos, sé que esa cosa...como quieras llamarla, te pone muy mal.

-Si... - sonrió nerviosa mirando los ojos azules del fortachón - yo...

Un auto para al lado de las camionetas y corta nuestra charla.

¡Oh sorpresa, Thomas sale del auto!

Maldigo en todos los idiomas, mientras Thomas camina como típico policía con el ceño fruncido poniendo cara de enojo, con las manos en el cinturón mirando de pies a cabeza a todos, especialmente a Leonard.

¡Pero lo voy a matar! ¿Qué demonios hace acá?

-Buenas noches - exclama fríamente mostrando su placa de detective.

Leonard, muy quitado de la pena se acerca a él.

-Buenas noches detective ¿algo está pasando?

-Es muy tarde - no me quita la mirada y me está molestando - me pareció raro que haya alguien en este sector.

-Sí, pero tenemos permiso para estar acá, estamos investigando la actividad paranormal de la fábrica.

-Ahhh bueno...-se acerca a mí - Di... ¿Nos vamos?

¡Te odio, te odio, te odio, Thomas! te pateare el culo ni bien tenga oportunidad.

-...Thomas - susurro entre dientes - me iré sola... Gracias.

Thomas sonríe - Ok, hasta luego Di - después vuelve a su auto.

¡Lamadrequelopario, lo voy a matar!

-¿Que fue eso? - pregunta Brad.

-Creo que un novio celoso - comenta Leonard sonriendo burlón.

-No, es mi novio - respondo molesta - muy bien atrapen a ese ente y me avisan... - no quiero estar más acá - hasta luego.

Entro a mi auto furia, ya no tengo ganas ni de despedirme de ellos, los cinco están completamente confundidos y perplejos,  no entienden que sucede, por mi parte lo único que deseo es estar muy lejos y escapar de este oso.

¡Mataré a Thomas, juro que lo mataré!

Llego a casa, estoy que echo humo por las orejas y zas Thomas está parado en la puerta de mi departamento.

Ni corta, ni perezosa me acerco a él y le doy un sopapo, empiezo a golpearlo, él me detiene como puede, me alza y me inmoviliza con facilidad...

-¡Suéltame!- grito.

-¡Vaya fiera! - exclama quitándome las llaves y sonriendo burlón.

-¡Suéltame o gritaré! - Chillo.

Abre la puerta mientras me abraza con fuerza para que no me mueva.

Entramos, Thomas me empotra contra la puerta para besarme, intento soltarme pero, siendo sincera, él me conoce tan bien, sabe cómo manejarme...sus manos ya están por todo mi cuerpo y ya estoy rendida.

Después lo mató, ahora necesito esto, quiero olvidar el stress, además el susto que pasé esta noche necesita ser olvidado.

Me lleva al cuarto, la adrenalina de la noche, mezclado con la rabia del momento hacen que tengamos un frenesí desenfrenado de pasión descontrolada, cuando terminamos exhaustos me acuerdo del oso que me hizo pasar y doy un salto de la cama.

-¿Por qué demonios hiciste eso? - Chillo, mientras me pongo su camisa que está a mi alcance.

-¿Que hice? - pregunta con ese tonito de inocente palomita.

-Ir a la fábrica... - entorno los ojos y cruzó los brazos - ¡No me cargues, Thomas!

-Si quieres te vuelvo a cargar - responde mientras me guiña un ojo y se sonríe burlón.

-Thomas, ¿entiendes el significado de "amigos con derecho"? - pregunto con seriedad.

-Llevo cinco años...- hace comillas con los dedos - viviendo el significado... Solo fui a ver a tus compañeros de trabajo, nada más - alza los hombros - solo para avisarles que tienes un amigo policía y que no se anden con jueguitos, lo hice para que te respeten.

-A mí me pareció una actitud de un novio celoso.

-¿Novio? Di, soy solo tu amigo amante, vuelve a la cama, el tema de nuestra "no relación" está trillado.

Suspiro, Thomas abre las sábanas y me meto a su lado.

****

Después de una noche de pasión, duermo de un tirón muy relajada, me despierto cuando el sol ya está entrando por la ventana.

-¿Pero qué hora es? - miro el reloj, son  más de las diez, busco con la mirada a Thomas y solo veo un papel en la almohada.

"Tengo que ir donde la familia de Natali a darles la noticia, se confirmó que el cuerpo que tu encontraste es el de ella, descansa, hablamos más tarde"

Me levanto estirándome, en la mesa encuentro café recién hecho y rosquillas recién compradas, el olor es exquisito.

Thomas me consiente mucho, tal vez demasiado, ¿estaré metiendo la pata? , pero él sabe, sé que está consciente de que sólo somos amigos con derechos.

Mientras tomo mi desayuno me acuerdo como lo conocí. Fue un día que tuve una visión de una mujer asesinada, hice lo mismo que hice con Natali, fui hasta donde ella me llevó, llamé a emergencias al descubrir su tumba y el primero en la escena del crimen fue Thomas.

Un chico entrados sus 30 años, con buen cuerpo, esa vez con uniforme policial, todavía no era detective de homicidios,  ojos claros un intermedio entre azules y verdes, labios carnosos y cabello castaño claro, muy agradable a la vista. Le conté como pasaron las cosas y se río en mi cara, me creyó una loca de remate, para colmo, me llevó arrestada como sospechosa, mientras me interrogaba, su madre apareció a su lado, había muerto ya hace unos años,  hablé de ella al verla y di datos exactos de cosas que ella hacía para que el me creyera, nunca olvidaré la cara que me puso, era de antología, se puso pálido y se sentó en la silla, mejor dicho se desparramó en ella boquiabierto, pálido como un papel.

Desde ese día, comenzó a creer en mí, lo ayudé a encontrar al asesino de la mujer con ayuda de mis visiones, cuando terminó el caso me invitó a salir, en algún momento de la cita empezó con sus rollitos de amor, lo detuve en seco y le dije que no era mi tipo pero que me agradaba como amigo.

Salimos varias veces, nos hicimos buenos amigos, diría los mejores, un día después de un levantamiento que me impactó demasiado, al ver,  literal, el cuerpo de un hombre esparcido por el bosque. Thomas me vió tan afectada, me trajo a casa y me consoló hasta que un beso tras otro nos llevó a la cama, después fui clara con él , le aclaré que él me hacía bien pero no de manera romántica, sólo cómo amigo y sexualmente, si quería, esos eran los términos y el aceptó, así andamos por años, se le salió muchas veces el "quiero estar contigo" pero siempre me negué.

No quiero nada con Thomas, es solo un buen amigo que me satisface cuando lo necesito y cuando los dos queremos.

En estos años él tuvo novias y yo respeté sus relaciones y yo tuve novios, el respetó las mías, obvio que siempre, cuando se acababa la relación,  volvíamos a nuestros encuentros.

Término de desayunar y veo un pomo de dulce entero a un lado de la mesa, se me hace agua la boca al verlo, es mi delirio, lo tomo y hay una nota pegada. "Sé que te gusta... Así que, alimento al monstruo ;P"

Tomo el móvil y tecleo" hay Thomas, te pasas, gracias por el pomo de dulce"

Meto mi cuchara al pomo y me lo zampo entero viendo la tele, hoy cerré el negocio, bloqueé mi mente, no quiero saber de nada, ni de nadie.