Wayne yacía en el suelo… sin vida.
—¡Wayne! —gritó Paola, corriendo hacia él—. ¡Wayne!
Lo sacudió desesperadamente por los hombros. De repente, los ojos de Wayne —también conocido como Michael— se abrieron con una mueca de dolor.
—¿Qué te ha pasado?
—Alguien me golpeó y me dejó inconsciente —dijo Mi