A la mañana siguiente, Paola se levantó temprano y fue directamente a la habitación de sus hijos. Con ternura, los despertó suavemente.
—¡Mami! —gritaron Clara y Ethan al verla, saltando de la cama para abrazarla.
La apretaron con fuerza, como si temieran que se esfumara.
—Te extrañamos tanto... —di