—¿A qué hora es la reunión? —preguntó Paola.
—Mañana a las 7:00 p.m. Puedo pasar por ti si quieres —respondió Michael.
Paola dudó un momento y luego preguntó:
—¿Sabías que el Príncipe Nolan está enterrado vivo?
—¿Qué? ¿Está muerto? —Michael preguntó sorprendido.
—No, no está muerto. Su cabeza no fue