—¿Qué estás haciendo tú acá?— Preguntó Ariadne sin demostrarle miedo, —¿Qué estás haciendo tú aquí?

—Vaya eres una persona demasiado afortunada después de sobrevivir al accidente y al balazo que te dí.— Daphne se mostraba sorprendida. Claramente no estaba alegre, —¿Será que dispare en una zona incorrecta de tu cuerpo?

—Es que no eres lo suficientemente inteligente y mucho menos tienes la capacidad de enfrentarme a mí sin esa maldita pistola.— Le dijo Ariadne entre dientes, —¿Sin esa pistola eres indefensa?

—No tiene caso que armes un espectáculo.— Clarisse se cruzó de brazos. Por dentro se estaba muriendo de ira, pero se mostraba serena ante la situación, —¿Por qué no te vas de acá ahora mismo que tienes oportunidad de hacerlo?

—¿Por qué yo no me puedo ir de acá con las manos vacías?— Daphne mantenía agarrada el arma de fuego, —Las dos se van a morir ahora mismo y con eso va a quedar sellada mi venganza.

—Ninguna de las dos tiene la culpa de lo que sufriste en tu pasado. Nosotras pode