Capítulo 1052
Mientras decía esto, miró a Yolanda y añadió: —¿Eres una gran estrella, verdad? Pues a ti también te toca. ¡El siguiente eres tú!

El vino salpicó sobre Mariana, y su paciencia se agotó por completo.

Con un movimiento rápido, le quitó la botella de vino a Óscar y la hizo caer al suelo, donde se rompió, esparciendo vino y vidrios por todas partes.

Mariana le dio una fuerte bofetada a Óscar, dejándolo aturdido una vez más. Luego, tomó otra botella cercana y la vació en su rostro.

—Si te gusta tanto beber, ¡disfruta! —le dijo con una sonrisa burlona—. Abre bien los ojos, porque yo no soy una acompañante.

Óscar cerró los ojos, su mano derecha, que colgaba a su lado, se apretó lentamente en un puño, aumentando la presión.

No podía soportar más. Esa mujer tan desconsiderada lo irritaba profundamente. Después de tantos años en Mesoluz, nunca nadie se había atrevido a tratarlo así. ¡Se había metido con él, y eso sería un error!

Óscar abrió los ojos, furioso, como si la ira estuviera a punto de
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP