Anthony cruzó los brazos sobre su pecho, con una risa torcida al escuchar algo interesante y no quejas de no ser correcto, como sucedía cada vez que él se hacía cargo de buitres que rondaban a su mujer.

No podían esperar que, aquellos que veían a Génesis como alguien accesible a simples imbéciles podían quedarse intactos. Por ello, ver a Mateo con cara de estar conteniéndose le resultó la ironía más grande.

Hermes le dio una mirada que el líder devolvió con una orden. Si sucedía, nadie debía siquiera enterarse. No tan rápido. El consejero no tenía problemas para poner una alfombra sobre la mierd@ que aplastaban sus jefes. Al contrario, era lo interesante de su trabajo.

Ryan los observó desde la distancia, pero no quiso entrometerse en ello. Después de todo, su trabajo se reducía a Leonardo y el cargo que ahora poseía. El consejero mayor se hizo a un lado cuándo vio a Adrián levantarse de su silla para ir hacia la entrada, soltando una risa al fin cuando su mujer apareció envuelta e