Mundo ficciónIniciar sesiónYa no hay más espejismos, pero, se siente extraño. Tan raro que me hace estar en un carrusel donde el mareo y la confusión no termina. Sin embargo, me alegra ver que hay alguien esperándome aunque no sé si es alguien que va a ayudarme.
— ¿Dónde me encuentro? — pregunto y cuando intento levantarme, mi cuerpo adolorido me impide moverme. — Angela… — Duele mucho. — digo y él me revisa el cuerpo con desespero, pero, sus toques duelen demasiado. Una fecha pasa entre nuestros rostros sorprendiéndome, así que, me angustio mucho al pensar que los Krauss van a hacerme mucho daño. — ¡Ya vienen! — grito angustiada. — ¿Qué estás haciendo, bastardo? — pregunta Lucifer mirando hacia una esquina mientras gruñe. — Los Krauss han venido a hacerme daño. — digo angustiada. — Mantente aquí, me haré cargo de este maldito hijo de puta. — dice Lucifer, pero, apenas corre hacia la fuente del ruido, la causa ha desaparecido. Parece que fuera un espejismo, u






