Todo inició dos días después, el caos se desató justo cuando comenzaba a olvidar el pasado. Cuando mis cosas posaban en el dormitorio de Harding, cuando mi relación con Kenny se había fortalecido y parecíamos llevarnos bien, cuando nuestros planes sobre el futuro parecían más sólidos que nunca. Incluso, todo pasó mientras hablábamos del tema. —Me gustaría que nos mudaramos de ciudad —murmuró Harding, mirándome de reojo para ver mi reacción. —he pensado en poder cantar mis propias canciones, tengo escritas bastantes y me gustaría que todos escucharán el sentí... Dejé de escuchar cuando Tikie me envió un texto, contándome que la camiseta de Thomas, la que había usado el día del accidente había desaparecido. Al parecer esos días desaparecida había estado recolectando evidencias, armando un rompecabezas que aún no conocíamos pero que comenzaba a tomar forma. El mensaje era confuso, no tenía mucha coherencia y... —Skyler, ¿estás prestandome atención? Mis ojos dejaron de revi
Cuando entré al departamento sentí que habían pasado años. Todo el lugar había cambiado desde mi ausencia y me lamentaba mucho que no hubiera sido de forma positiva. Thomas tenía el lugar completamente abandonado, los sofás estaban llenos de comida rápida y basura de cualquier lugar. El comedor estaba más bien lleno de documentos y carpetas apiladas una sobre otra y el piso estaba pegajoso gracias a toda la cerveza tirada. —No me puedo creer que viva de esta forma —susurró Tikie, negando con la cabeza —parece que este lugar no ha sido limpiado desde que te fuiste. No le respondí. Mi boca era incapaz de articular palabras. Ambas entramos directo a la habitación, había ropa por todas partes, no solo de él, también de Mar. Podía reconocer perfectamente su perfume Chanel, sus zapatillas negras y su vestido negro favorito. —¿Puedes recordarme que hacemos aquí? —pregunté.Ella me miró, como si fuera una pregunta estúpida. —Necesitamos encontrar algo que lo vincule con el accidente
Los pulmones no me dejaban tomar más aire, estaba a punto de sufrir un ataque y mi pecho parecía apunto de estallarme.Me encontraba aterrada, desesperada. Y por eso solté todo el aire cuando cruce la puerta principal de nuestra casa.Harding se giró de golpe al escuchar mi voz gritando por ayuda, dejando la guitarra en el suelo al verme tan angustiada.—¡Skyler! —jadeó.El grito que vociferó causó que Kenny soltará la carpeta repleta de documentos que tenía en las manos casi de inmediato. Sus ojos me miraron y con eso supo que algo grave había pasado. —¡Tikie... fuimos... Thomas ....!Estaba hiperventilando, no podía hablar con coherencia, mis palabras eran divagaciones sin sentido. —¿Qué está pasando? —preguntó Kenny, tomando las llaves de su auto. —Tikie está en el departamento de Thomas. —solté, estallando en lágrimas. Sus labios se abrieron de golpe, al mismo tiempo que sus piernas se movieron a la salida, con Harding detrás de el. Corrí detrás de ellos, sin detenerme a pen
Parpadee un par de veces y abrí los ojos lentamente, la luz blanca de mi alrededor me hizo volver a cerrarlos con una mueca de dolor. Fragmentos de lo que había sucedido llegaron a mi mente rapidamente. El auto desparramado por la carretera húmeda, mi cuerpo saliendo por el parabrisas, mi cabeza golpeándose contra la acera, el dolor punzante de los trozos de vidrio encajados en mi cuero. El dolor insoportable, agudo. Mis manos temblorosas tomando el celular para llamarle a alguien, y luego otro golpe, duro y seco en mi cabeza. Haciéndome perder el conocimiento de nuevo. —¿Cómo se encuentra? —un hombre de bata blanca y cabello canoso me sonrió con amabilidad —¿Se siente mejor? —¿D-dónde estoy?—pregunté, con impaciencia. —En el hospital, ¿Recuerda algo de lo que le pasó? —Un accidente. —Así es señorita, un accidente automovilistico —apretó los labios —¿Sabe quién es usted? Cerré los ojos un momento, intentando concentrarme, cuando volvi a abrirlos asentí con la cabeza levemente
Cerré la puerta con cuidado mientras mi mano era tomada por la de Thomas. Habiamos entrado a un departamento, el cual supuestamente nosotros habiamos adquirido tres meses antes. En nuestro tercer aniversario. Sujeté mi cabeza con una mueca cuando sentí un leve mareo. De pronto era como si mi mente se hubiera ido muy lejos de ahi. Cerré los ojos y tomé con más fuerza la mano de mi novio, intentando mantenerme en pie a pesar del dolor que comenzaba a experimentar. «Hacía frio ese día en la mañana. Abrí la puerta con una sonrisa y mi boca se abrió completamente cuando vi el precioso apartamento que se encontraba frente a mi. Era enorme, tenia un piso de madera precioso y una chimenea gigante... Todo eso era verdaderamente hermoso, pero lo que mas llamó mi atencion fueron los enormes ventanales que se enconteaban alrededor, mostrando una vista divina de la ciudad....»Sacudí la cabeza con fuerza cuando otra punzada de dolor me abarcó repentinamente, me llevé la mano a la zona afectada i
Abri los ojos con lentitud y vi que el reloj marcaba las 5:01 pm. Frunci el ceño y tomé el celular. Tenia 3 mensajes de Thomas avisando que los chicos llegarian a las 5:30.Puse una mueca de disgusto, tenía exactamente veintinueve minutos para vestirme, aunque cabia la posibilidad de que no fueran puntuales y llegaran despues de la hora acordada. Suspiré con fuerza y entré al baño con la intención de no perder más tiempo del necesario.Justo al lado de la puerta pude ver que había un espejo que reflejaba mi cuerpo por completo. Miré al espejo con atención, mi cabello castaño estaba opaco y deshidratado, bajo mis ojos celestes había unas bolses enormes de ojeras y en mi frente un golpe de color morado. Frunci los labios, habia una cortada en mi barbilla.Mi cuerpo seguia doliendo, tomé el borde de la blusa y la levanté con cuidado. Una cicatriz en sanación cruzaba de forma vertical el abdomen, era delgada pero notable. Mis brazos estaban golpeados
«Miro hacia todas partes, no sé donde estoy. Es un cuarto con paredes blancas, todo está borroso. Tengo una aguja clavada en mi piel y un hombre canoso me sonrie amigablemente, pero eso no me hace sentir mejor en lo más minimo.—¿Dónde estoy?—pregunto debilmente.—¡Linda! —un hombre de ojos color avellana se acerca a mi con una sonrisa —oh dios mio, estaba tan preocup...—¿Quién eres tú? —mis ojos se abren por completo y mis alarmas se encienden. Intento ponerme de pie —¿dónde está mamá? ¿dónde esta papá? ¿qué pasó?—Linda no...—el hombre trata de tomar mi rostro pero yo lo empujo con fuerza —Sky tranquila.—¿Cómo sabes mi nombre?—un par de mujeres con bata blanca se acercan a mi y yo empiezo a jalar, intentando levantarme —SUELTENME ¿DÓNDE ESTOY! ¡QUIERO IRME A CASA!El chico castaño empieza a llorar y esa es la última imagen que me llevo cuando cierro los ojos.»Mis ojos se abrieron lentamente, temiendo que no estuviera en casa con Thomas. Mi cuerpo estaba tenso y rigido mientras la
Habia pasado una semana. Siete dias confusos donde las pesadillas no desaparecían y todas se repetían. Todas relacionadas con el accidente. También fueron siete dias donde conocí más a Thomas, dándome cuenta del novio tan perfecto que era. Siempre me daba regalos, llegaba con pequeños detalles e incluso me invitaba a salir todos los dias después del trabajo. Habiamos recorrido muchos lugares, sitios donde se suponía habiamos pasado muchos momentos hermosos juntos; pero, a pesar de eso jamás pude recordar nada. Era domingo de nuevo y estaba desgastada emocionalmente, era cansado no dormir debido a las pesadillas, estresarme por no poder recordar, tener deja vu confusos, mantenerme alerta todo el tiempo y simplemente fingir como si nada hubiera pasado. Tratar de aparentar que todo estaba bien aunque no fuera así. Solté todo el aire de mis pulmones y me dejé caer en el suelo tras sentir un peso indescriptible en los hombros. Thomas estaba en la oficina y podia derrumbrarme un poco.