Capítulo 8

Punto de Vista de Elara

​—¡Señorita Elara Vane!

​Me giré para ver a un guardia masculino que se apresuraba hacia mí. Era alto y bien formado. Su uniforme, aunque pulcro, era rígido; claramente alguien que no estaba acostumbrado a tratar conmigo en un ámbito personal.

​—Su padre, Diego Vane, ha emitido una orden directa—dijo el guardia, poniéndose firme—. Debe ir a pie a su destino. Es su voluntad.

​¡¿Pero qué diablos infernales?!

​Me quedé helada, con el rostro arrugado por la sorpresa. —¿Qué? Pero… ¡pero la carnicería está a kilómetros de aquí! Me llevará horas llegar a pie. Y podría terminar tarde, yo…

​El guardia, retorciéndose las manos, evitó mi mirada. —Él… él dijo que era por su propio bien, Señorita.

​—¿Mi propio bien?—repetí, desconcertada—. ¿Qué significa eso?

​Se encogió de hombros, luciendo más confundido de lo que me sentía yo. —Yo… no lo sé, Señorita. Pero… pero esas fueron sus órdenes.

​Lo miré, atónita. Por supuesto, Diego Vane haría algo como esto. No se trataba de se
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP