Me duche y luego me fui donde Alexa, dormía profundamente entonces tuve el cuidado de no despertarla. Al día siguiente que me desperté ella aún estaba dormida, fui cuidadoso y lo primero que hice fue cortar un alcatraz en la parte trasera de la casa.
— Buenos días, cariño — Alexa venía bajando las gradas mientras frotaba sus ojos — estás hermosa, mis ojos se quedaron ciegos al ver tanta belleza.
— Buenos días, Jesse — ella se puso a reír — eres un meloso de primera categoría, con esas labias no me vengas porque no te lo creo.
— Ten — le di la flor y ella sonrió — te daré una cada día, verás que voy a enamorarte tan bonito que serás tú la que me pida matrimonio.
— Espero que sembrarás suficientes alcatraces — ella la olió — porque a este paso vas a dejar sin una sola flor el jardín que hiciste.
— Eso no importa — la alce por los aires mientras la sostenía de la cintura — si es necesario voy a comprar un campo vacío y sembraré esta flor que tanto te gusta, te amo Alexa.
— Cuánta m