Cap. 21 La cita
Rowena sentía el viento frío y miró el libro que estaba en el piso, se acercó a recogerlo y de uno de los libros salió una carta amarillenta que le llamó la atención.
Miró al libro y leyó el título: “El Tesoro de disponer de un buen banquete”, supuso que nadie leería algo tan aburrido, y desdobló el papel y leyó.
“Querida Enri”
Espero que estés guardando el reposo necesario que un embarazo exige. Estaré llegando para el gran momento en que nuestro hijo de su primer llanto en el mundo, espero que todo salga bien y que Bruno nunca sepa que su madre se embarazó después de irse de casa, no te juzgo querida cometimos excesos, pero el solo hecho de tener un hijo contigo me hace sentir dichoso.
Te amo, Gilberto.”
Rowena estaba sorprendida con lo leído, se sentó en el suelo y releyó la carta una y otra vez, no podía dar crédito, allí decía que Enrietta tuvo otro hijo y ese hijo era Bertino, ¿cómo no lo vio antes? Guardó la carta en su pecho, salió después muy nerviosa y fue a su habitación en