Elara, con su sabiduría ancestral, añadió: —Cada obstáculo superado es un paso más hacia la luz. Han enfrentado la oscuridad de Gustavo y han salido más fuertes. Ahora deben usar esa fuerza para desvelar los secretos de la familia y encontrar lo que buscan.
Richard abrazó a Valentina con renovado afecto. —Estamos juntos en esto, mi amor. Nada ni nadie nos va a separar. Encontraremos ese cofre, descubriremos la verdad y construiremos el futuro que merecemos.
Valentina apoyó la cabeza en su pecho, sintiendo la solidez de su amor como un ancla en medio de la tormenta. Asintió, con una nueva determinación brillando en sus ojos.
—Así será, Richard. Juntos.
La amenaza de Gustavo había sido neutralizada, al menos por el momento, pero la urgencia de encontrar el cofre y desentrañar los secretos de la familia se había intensificado. El amor y la lealtad que compartían los cincos amigos se habían fortalecido en medio de la adversidad, preparándolos para los próximos pasos en su peligrosa búsque